Miraba el reloj que se había vuelto un yin-yang que se había vuelto rueda, revoloteaba una mariposa en la ventana que había vivido más de un día, naranja brillante, como un atardecer de primavera. Se acerco a mirarla y de cerca era otra cosa, no podría decir si era hermosa o muy fea. Qué insecto extraño la mariposa, se habían adornado de colores ahí donde nadie esperaría, pero tenía alas majestuosas y el ser humano no puede juzgar con claridad lo que vuela.
Volvió a mirar el reloj que había atrapado al tiempo y comenzó a girar para atras. Se movió del lugar, como siempre que percibía que permanecía demasiado tiempo quieta, temía que le crezca una enredadera.
El tiempo también vuela.
17 de noviembre de 2017
Tiempo
Publicadas por nadine a la/s 11:45 a.m.